Un total de 56 futbolistas han jugado dos finales de la Copa Mundial. Sin embargo, solamente cuatro de ellos lograron marcar en ambas.
Vavá y Pelé, autores de dos dianas cada uno en el triunfo por 5-2 de Brasil sobre Suecia en la final de 1958, fueron los primeros. Cuatro años después, Vavá anotó el 3-1 definitivo en la instancia decisiva contra Checoslovaquia, mientras que Pelé -que se perdió aquella final por una lesión- marcó de cabeza el primer gol de los suyos en la victoria por 4-1 sobre Italia en la final de 1970.
El siguiente de los cuatro protagonistas fue el alemán Paul Breitner, que vio portería desde el punto de penal en el triunfo por 1-2 sobre Países Bajos en la final de 1974. Ocho años más tarde, Breitner hizo el del honor en la derrota por 3-1 ante Italia.
El último en conseguir esta gesta fue Zinedine Zidane, autor de dos goles de cabeza en la final que Francia le ganó 3-0 a Brasil en 1998. En 2006, contra Italia, Zidane inauguró el marcador desde los once metros recién iniciado el partido, pero los galos acabaron cayendo en la posterior tanda de penales.